Killer Instinct: resucita tu instinto asesino

Hace ya unos artículos os hablé de Street Fighter V y de cómo, lamentablemente, sus errores de conexión estaban lastrando un juego más que notable.

Pues bien, a estas alturas todavía continúan los errores y aprovechando la ocasión uno de sus más directos rivales ha decidido contraatacar.

Killer Instinct – Auuuu, ¡el instinto asesino llama a tu puerta! ¿O debería decir a tu ventana?

Desarrollado en sus inicios por Rare y distribuido por Midway para la gran N, fue sin duda una de las sagas de lucha más exitosas a mediados de los noventa.

Pasados unos años, Microsoft adquirió los derechos de la franquicia e Iron Galaxy fue la encargada de desarrollar un nuevo y mejorado Killer Instinct para Xbox One, un ambicioso proyecto que lanzaría en formato digital y con tintes free to play.

Dando una vuelta más de tuerca y siguiendo con lo que al parecer va a ser una política usual por parte de Microsoft en relación a sus mejores franquicias, este pasado 29 de marzo Killer Instinct llegaba a Windows 10, permitiendo su descarga directamente desde la tienda a nuestro PC de forma totalmente gratuita.

Solo tendréis que reservar 23 GB de nada de vuestro disco duro repleto ya de miles de juegos, música y películas de dudosa reputación, pero qué más da, ya os digo yo que merece la pena.

Y como estoy seguro de que tú no lo sabías, vengo a contarte en primicia este notición, para que salgas corriendo a descargártelo y empieces a buscar una buena excusa por el tiempo que vas a pasar jugando, porque no sé si la novia te lo perdonará.

Hace unos meses Phil Spencer, director de la división de Xbox, confirmaba la posibilidad de poder compartir los juegos de Xbox One y PC.

Es decir, que si ya has comprado Killer instinct para Xbox One y ahora te lo descargas en tu Windows 10, tanto el progreso como los luchadores que tuvieses en tu consola serán automáticamente heredados por el nuevo sistema.

Killer Instinct en su formato free to play te permitirá jugar con un personaje que irá rotando aproximadamente cada mes, más que suficiente para disfrutar del juego, pero puedes comprar personajes de forma individual o un paquete completo, estos van saliendo por temporadas y, actualmente, van por la tercera temporada. El precio de estas tres temporadas es de unos 50 €.

Sí, ya sé lo que estáis pensando: ¡mucha palabrería pero lo que quiero saber es si lo has jugado y si es bueno de verdad o nos estas vendiendo la moto!

¡Pues claro que lo he jugado! ¿Por qué clase de redactor me habéis tomado?

Pero no voy a hablaros de características técnicas, ni de la cantidad de personajes o de lo bien que se mueven, ni de su extraordinaria banda sonora, ni de las miles de cosas que hacen de este pedazo de juego una elección segura y un imprescindible, ni siquiera voy a recordaros que es gratuito. No voy a hablaros de nada de eso, hoy prefiero contaros directamente de mis sensaciones.

Después de la decepción que me llevé con mi querido Street Fighter, esperaba con ansia un juego que cubriese todas mis expectativas y Killer Instinct lo ha conseguido.

Prepara tu bebida energética favorita, una pizza, unos buenos cascos para disfrutar del sonido y apaga todas las luces de la habitación. Así es como debes disfrutar este híbrido entre Mortal Kombat y Street Fighter.

Tras una interfaz muy intuitiva, seleccionas tu personaje y el modo de juego, la música comienza a dar caña y tu personaje con un diseño impecable está deseando tomar el ring de lucha.

¡Comienza la pelea! Los personajes se mueven muy rápido, están bien diseñados y sientes una extraña adicción que te impide dejar de pulsar todos los botones. No sabes lo que haces, pero todo se ve excelente en la pantalla con tantos puñetazos, patadas, espadazos, desgarros y sangre.

Enseguida te das cuenta de lo fácil que resulta jugar, pero no de dominar, como todo buen beat’em up .

Con tanto modo de juego y con la posibilidad de evolucionar a tus personajes, y con ello encontrar nuevos objetos, pasarás horas y horas sin darte cuenta. Yo al menos me lo estoy pasado pipa y pienso seguir aprendiendo nuevos combos para hacerte morder el polvo si nos encontramos en la arena chaval.

Me ha gustado:

Corre a 1080p y 60 fps.

Compatible con los stick de Xbox One.

Poder subir de nivel los personajes.

Múltiples modos de juego –modo historia, uno contra uno, online, supervivencia– y todos ellos gratuitos desde un principio.

Muy buena curva de aprendizaje.

La música excelente y dinámica, cambia en relación a lo que esté ocurriendo en pantalla.

No me ha gustado:

Por poner un conque, quizás el propio modelo de free to play, ya que parece quitarle importancia al título y aunque me parece acertado en un principio, este juego tiene suficiente calidad como para sustentarse por sí mismo ofreciéndose como un producto completo en el modelo de venta estándar.

Jugabilidad: 90%

Movimientos muy intuitivos y rápidos a 60 fps, todos los movimientos del stick se reflejan de forma perfecta en la pantalla, además también se juega de manera muy cómoda con el teclado.

Gráficos: 85%

En Killer Instinct lucen muy bien, los personajes y escenarios están muy bien dibujados y se ven a 1080p, si bien es cierto que para ser de PC podrían haberse mejorado un poquito.

Sonido: 95%

Una banda sonora estupenda incluso para escuchar en vuestro tiempo libre, acompañada de un buen puñado de efectos sonoros. Me encanta el sonido de los golpes directamente en el cuerpo.

Aquí tenéis la banda sonora perfecta para vuestros entrenamientos.

Jugo: 90%

Nuevas temporadas cada poco tiempo con nuevos personajes e historias, un gran número de modos de juego, que a la vez se dividen en otros tantos, y una comunidad competitiva cada vez más grande lo convierten en un juego interminable. Tienes juego de lucha de por vida o, al menos, hasta que Microsoft se canse de él.

Resumen final: 90%

En ausencia del supuesto grande, este Killer Instinct se antoja como digno sucesor que no tiene nada que envidiar a sus competidores y que, día a día, mejora para ofrecernos una experiencia superior. Para mí, una grata sorpresa y, como ya he dicho en anteriores líneas, un imprescindible en mí biblioteca.

¿A que estás flipando con la banda sonora?